El juez de Garantías N° 3 de la ciudad de San Luis, Marcos Flores Leyes, hizo lugar al pedido del abogado Federico Putelli y dictaminó que su defendido, un joven de 18 años acusado de homicidio calificado por el vínculo en grado de tentativa, permanezca detenido bajo prisión domiciliaria y monitoreado electrónicamente con una tobillera, por un plazo de 120 días. La víctima de la agresión fue su padre.
La medida de coerción la cumplirá en la vivienda de la madre del imputado, ubicada en el barrio Libertad. Como se trata de una persona con problemas de consumo, principalmente de alcohol y pastillas, el magistrado ordenó también que se comunique su situación al Hospital Escuela de Salud Mental para que le den ingreso y pueda comenzar un tratamiento por sus adicciones.
Además, desde el Juzgado se oficiará al Gobierno de la Provincia, a través del Ministerio de Seguridad, para la colocación del dispositivo electrónico. Flores Leyes también ordenó la prohibición de consumo de cualquier tipo de estupefacientes y/o bebidas alcohólicas, y una restricción de acercamiento entre el agresor y la víctima.
Las medidas fueron emitidas este martes a la mañana en la continuidad de la audiencia de formulación de cargos realizada el 18 de febrero pasado. En caso de que el acusado no cumpla con la prisión domiciliaria o con algunas de estas disposiciones, se realizará una nueva audiencia, pero esta vez por incumplimiento de una orden judicial.
El hecho
El viernes 17 de febrero pasado, el joven apuñaló con un cuchillo a su padre, en el barrio Telepostal de la ciudad San Luis, y le ocasionó heridas en el sector del estómago, colon, intestino y baso.
En la audiencia de formulación de cargos, realizada 24 horas después, la Fiscal María del Valle Durán imputó al agresor por el delito de “Tentativa de homicidio calificado por el vínculo”, y solicitó 120 días de prisión preventiva. La defensa del acusado, representada en ese momento por la Defensora Oficial Nadia Agúndez, pidió prórroga de ocho días, medida que fue concedida por el juez.
Dicho plazo se cumplió hoy por lo que se retomó la audiencia. El imputado se presentó con el abogado Putelli, quién solicitó para su defendido la prisión domiciliaria, la tobillera electrónica, la autorización para que realice un tratamiento ambulatorio y una prohibición de acercamiento entre padre e hijo.
“Atendiendo al estado psíquico y psicológico de mi defendido, entendemos que lo mejor es la prisión domiciliaria inter se siga sustanciando la causa, con la posibilidad de tener una tobillera electrónica y autorización para que realice un tratamiento ambulatorio. Mi defendido presenta reiteradas lesiones, intentos de suicidio y es muy delicada su situación. Su padre también tiene la voluntad de que su hijo pueda tener una recuperación, no desatendiendo el hecho en sí. Es un pedido que planteamos como medida supletoria a la prisión preventiva”, alegó Putelli.
El joven en la audiencia dijo que está dispuesto a someterse a controles para confirmar que no está consumiendo y que está cansado de hacer sufrir a su familia.
La Fiscalía dejó sin efecto el pedido de prisión preventiva
La fiscalía, por su parte, representada por Durán y la fiscal adjunta Claudia Heit, luego de escuchar los argumentos de la defensa y de entrevistarse con la víctima, desistió de la prisión preventiva, pero solicitó que la domiciliaria sea controlada periódicamente y monitoreada con una tobillera electrónica. Y que se autorice la salida de la vivienda para que el joven realice un tratamiento. Además, pidió escuchar en la audiencia a la madre del acusado.
“Atendiendo a cuestiones de índole familiar y a la paz social a la que apunta este nuevo sistema, y habiendo escuchado a la víctima, voy a dejar sin efecto el pedido de la prisión preventiva. También en razón a la edad del imputado y entendiendo que, en este caso en particular, sería perjudicial para su situación de adicciones pasar estos cuatro meses en el Servicio Penitenciario. No obstante, dicha prisión debe ser controlada periódicamente y con una tobillera”, dijo Durán.
La palabra de la madre
“Hace poco mas de cuatro años que llevamos a nuestro hijo a tratamiento y solicitamos una internación. El papá es el que lleva los papeles para hacer una curatela. Estábamos en eso cuando ocurrió todo esto. Estoy dispuesta en tenerlo en casa hasta que consigamos un internado, soy ama de casa por lo que permanezco de manera permanente en mi hogar”, dijo la mujer.
Fuente: Periódico Judicial