El 9 de enero del 2020 la Comisión de Salud Municipal de Wuhan, China, anuncia la primera muerte por coronavirus causada por una neumonía severa.
El fallecimiento ocurrió apenas nueve días después de que el país reportara a la Organización Mundial de la Salud (OMS) que en su ciudad de Wuhan casi una treintena de personas padecía una extraña neumonía de origen desconocido.
“Un hombre de 61 años murió de neumonía en la ciudad central china de Wuhan en un brote de un virus aún no identificado, mientras que otros siete se encuentran en estado crítico”, había informado la Comisión de Salud Municipal de Wuhan el 11 de enero, dos días después del deceso. Así lo replicaban los principales medios del mundo.
El 30 de enero de 2020 -21 días después de la muerte-, con más de 9.700 casos confirmados en China y 130 decesos, y 106 casos confirmados en otros 19 países, la OMS declaró que el brote era una emergencia de salud pública de interés internacional. El 11 de marzo, finalmente, la calificó como una pandemia.